Radio Martí

Belinda Salas Tápanes

LA HABANA, Cuba, junio (www.cubanet.org) - Recientemente las trasmisiones de radio y televisión Martí han generado polémicas dentro y fuera de la isla. Algunos aseguran que las trasmisiones de onda corta no se escuchan en la isla y han cuestionado el uso de los fondos destinados al proyecto.

En un recorrido realizado por las provincias orientales, se comprobó la audiencia de la emisora y las opiniones de los entrevistados demostraron que la población en las zonas rurales evidencia su preferencia por los programas que se trasmiten.

Los que han emitido criterios negativos respecto a la audiencia que tiene la emisora nada conocen de la realidad. Radio Martí es la única ventana que tenemos al mundo real, nos ofrece una programación informativa, de orientación cívica y, sobre todo, sin censura. “Así, los cubanos nos sentimos más identificados” -indico Orlando Ferrán, residente en Palma Soriano, provincia Santiago de Cuba.

Por otra parte, Nersa Fernández, bibliotecaria independiente de la región, aseguró que los espacios más escuchados son debatidos entre los pobladores, la información se trasmite de boca en boca y hasta se cuestiona la duración y frecuencia de algunos, como Cuba por dentro, Contacto Cuba, Lectura sin censura y Voces.

Fernández destacó la importancia del espacio noticioso y aseguró conocer el acontecer de la sociedad civil en Cuba gracias a esta emisora.

Radio Martí, fundada en 1985, trajo a los cubanos la realidad de un mundo desconocido. Hasta su creación, vivimos sumidos en la ignorancia total. Para muchos, no existían prisioneros políticos en la isla, se desconocía el concepto “derechos humanos”, y la existencia de la oposición interna.

Para todos los que en estos años han encontrado en Radio Martí la única alternativa al discurso oficial, es de vital importancia su permanencia en el aire. El gobierno ha invertido tiempo y dinero en desacreditar y cuestionar lo que en Radio Martí se trasmite, alegando además que no se escucha, que sus colaboradores en la isla son mercenarios al servicio de una potencia extranjera, y que se trata de una emisora subversiva creada para desestabilizar la revolución.

Pero no ha logrado impedir que se escuche desde los tiempos de la novela Esmeralda, hasta la actualidad, cuando se esperan las noticias del último prisionero en huelga de hambre, la caminata de las Damas de Blanco, y la represión de que son víctimas los activistas de derechos humanos.

Esas y muchas otras son verdades que el régimen trata de ocultarle a nuestro pueblo y al mundo. Radio Martí es la voz de los que viven en la Isla.

Fuente: http://www.cubanet.org/CNews/y09/junio09/22_C_5.html