LU5, la radio que le cambió la historia a la ciudad de Neuquén

Desde el 10 de abril de 1945 la emisora está presente en los hogares de miles de familias, fieles oyentes de inolvidables transmisiones.   Por VICKY CHAVEZ Varios géneros, entre ellos el radioteatro, atraparon la atención de los neuquinos y se perfilaron compañías como Amancay y Marzorati-Edelman. Neuquén > El 10 de abril de 1945 se inauguraba en esta ciudad LU5 Radio Neuquén, con una vasta zona de irradiación en la región del Comahue. La Red Argentina de Emisoras Splendid en la década del 40' realizaba sus primeras transmisiones para cubrir de información y entretenimiento a todo el país. Para poder escribir la historia de determinada institución afincada en nuestra ciudad, otrora territorio nacional y devenido en provincia, es preciso obtener información del pasado a través de distintas fuentes como documentos escritos, restos materiales (monumentos), dibujos, grabados, tradición y testimonios orales. Una de esas fuentes es la fotografía: la imagen que nos acerca a la historia contemporánea atesorada por los descendientes de quienes nos ayudan a recordar. El primer director de la radio, Germán Zan, le entregó a Osvaldo Arabarco una carpeta plagada de recuerdos para que se escribiera la historia de la emisora. Uno de los documentos recuperados es el programa de festejos de la semana de Mayo en aquel histórico año 1945. Dentro de una serie de eventos, que comenzaron a llevarse a cabo el día 22 con una velada teatral en el Cine Teatro Español, protagonizada por el grupo Amancay, le tocó a LU5 el día y el horario central. El 25 de mayo, a partir de las 19.30, anunciaban la "Audición especial de LU5". El programa contaba con las siquientes participaciones: Himno Nacional, Conjunto Puntano de música folklórica, declamación a cargo de Nélida Funes de Álvarez, disertación a cargo del gobernador Don Bartolomé Peri y la transmisión a partir de las diez de la noche de un baile social organizado por el Club Pacífico en adhesión a las Fiestas Patrias. El radioteatro atrapó la atención de los neuquinos y se perfilaron compañías como Amancay y Marzorati-Edelman, que nacieron a través de las emisiones de LU5. Como su nombre lo indica, el radioteatro fundía magistralmente la radio con el teatro. Lo que se hacía era transmitir por radio capítulos de una novela y luego hacer la versión teatral de la misma novela. Compañías El referente más importante y recordado del teleteatro neuquino fue Jorge Edelman, quien abandonara este mundo hace poco tiempo, y que alguna vez relató que en 1956 el entonces  director de la radio, el señor Vanoli, le ofreció ser cabeza de una compañía radioteatral. Y en 1957 formó su propia compañía. Al año siguiente conoció a Marzorati durante una de sus visitas a Neuquén, oportunidad en la que firma un contrato con LU5. Posteriormente se instalaría en la ciudad con su esposa Nelly Ortiz y su hija Lucerito; al poco tiempo sus compañías se asociaron. La primera obra fue "Tijereta Vizcacha, el terror de las muchachas". También en la vida se unirían, pues unos años después  Jorge contrajo matrimonio con Lucerito. Los dueños de la palabra Parte del staff que integraba la emisora en la década del 50' quedó retratado en valorables documentos fotográficos.   Neuquén > Testimonio de LU5 es la fotografía que se observa al pie, tomada en la década del 50' en la sala de transmisión. Allí se puede apreciar a Jorge Edelman, Dante Alvarado, Lucerito Aguilar, Sr. Marzorati y su esposa Nelly Ortiz, entre otros adultos, y los niños de ayer: Jorge Carlos Chávez, Chango; José Ángel Netto, Juan Carlos Comoli, María Amalia Vanoli (hija del recordado director de la emisora don Silo Vanoli); Patricio Nico Ruso; Rodolfo Butteler, Pocho Rossi, Joven Schrull, Panito Barbosa, Chato Junge; Daniel Laurino entre otros. Queda demostrado que, por un lado, la fotografía es un arma indispensable para recordar, revivir y conocer la historia local de las últimas décadas, y por otro, permite reconocer su utilidad como fuente a través de las imágenes antiguas para reconstruir nuestro pasado y reconocernos en él. Fuente:    URL: http://www.lmneuquen.com.ar/noticias/2009/5/25/28783.php