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SONRIENTE. SANTA MARIA QUIERE MAS PODER POLITICO Y MEDIATICO.
Víctor Santa María planea consolidar su propio grupo de medios
en la Ciudad.
Por: Alejandro Alfie
El "día D" para Víctor Santa María es el 24 de marzo. Ese día pretende inaugurar una radio propia. Pero las diferencias que ahora lo distancian de Néstor Kirchner lo complican un poco. Ya todo estaba en camino y sobre rieles. Había una programación decidida y hasta un director de la radio designado: Eduardo Aliverti.
Pero ahora todo es incierto. La política y los sismos internos del kirchnerismo le inyectaron internismo a lo que debería ser una decisión técnica del COMFER.
"Elegimos ese día, porque es algo simbólico para nosotros, en el aniversario del golpe del '76", explicó Santa María a Clarín. Y agregó: "Ya tenemos la adjudicación de la frecuencia, el transmisor, los estudios y la antena; sólo nos falta ajustar un poco la programación y la cuestión técnica".
Santa María tutela el núcleo de un multimedio que en la ciudad de Buenos Aires tiene la revista Caras y Caretas, el centro cultural que lleva el mismo nombre, el sitio en Internet VSM2.0 y el semanario DiarioZ, que lanzó hace dos meses para enfrentar a Mauricio Macri en la política de la ciudad.
En rigor, Santa María no figura como titular de la licencia en el Decreto 1779, que adjudicó esa frecuencia, sino que está a nombre de una sociedad formada por el presidente de la Fundación Octubre -del gremio-, Santiago Roberto; el ex vocero de Antonio Cafiero, Renato Miari y otros tres socios.
Consultado sobre el tema, Santa María atinó a responder: "Ustedes ponen que soy el dueño, pero yo solo colaboro". Sin embargo, también salió como vocero en varias entrevistas diciendo que él asumía la gestación de la radio por la que tanto puja. Algo similar ocurre en el Partido Justicialista de la ciudad, donde el titular es Juan Manuel Olmos, pero quien lo maneja, según las fuentes, es el mismo Santa María, sin que figure su nombre entre las autoridades del PJ Capital.
La cuestión con el líder de los porteros es que no trabajó en la campaña para diputado de Carlos Heller como quería el kirchnerismo. Santa María maneja un sector del fragmentado el peronismo porteño y tenía -y tiene- ambiciones políticas propias. Néstor Kirchner dejó de apoyarlo en la gestión de la radio, y se distanció abiertamente, cuando Santa María invitó al cumpleaños de su gremio a Francisco de Narváez. Fue un gesto político demasiado fuerte y Kirchner ya no lo quiere en el dial.
La AM 750 se adjudicó a través de un concurso público, que empezó en mayo de 2007 y culminó en noviembre del año siguiente. Pero todos los que participaron lo recuerdan como el concurso más conflictivo de los últimos años, con impugnaciones que todavía no fueron respondidas por el COMFER, ni por su continuador, que es la Autoridad Federal de medios audiovisuales.
Una apoderada que participó del concurso recuerda el escándalo que terminó a los gritos cuando ella acusó a Susana Pachecoy -pareja del número dos del COMFER- de copiarle varios escritos en ese concurso. "Pachecoy se llevaba el expediente y después se presentaba en representación de otro oferente, copiando lo mismo que yo había puesto", se quejaba ayer esa abogada, que prefirió no dar su nombre para evitar problemas con una de las personas que más poder tiene dentro del organismo que aplica la ley de medios.
Otro de los participantes en el concurso de la AM 750 recordó que originalmente Néstor Kirchner quería dársela a Santa María para que le administre la radio en la ciudad, cuando ambos eran socios políticos. Por eso, habrían sido descalificados los otros cuatro oferentes "por cuestiones de forma", dijo la fuente; y, entonces, la única que pudo ser evaluada en función de su propuesta cultural fue la sociedad Buenos Contenidos, apadrinada por Santa María
Además del problema político, la asignación de una frecuencia que no estaba operativa en la ciudad de Buenos Aires presenta conflictos con Radio Cooperativa, con una radio que emite en Uruguay en la frecuencia de 740 Megahertz y con los otros cuatro oferentes que quedaron afuera del concurso.
Pero ahora todo es incierto. La política y los sismos internos del kirchnerismo le inyectaron internismo a lo que debería ser una decisión técnica del COMFER.
"Elegimos ese día, porque es algo simbólico para nosotros, en el aniversario del golpe del '76", explicó Santa María a Clarín. Y agregó: "Ya tenemos la adjudicación de la frecuencia, el transmisor, los estudios y la antena; sólo nos falta ajustar un poco la programación y la cuestión técnica".
Santa María tutela el núcleo de un multimedio que en la ciudad de Buenos Aires tiene la revista Caras y Caretas, el centro cultural que lleva el mismo nombre, el sitio en Internet VSM2.0 y el semanario DiarioZ, que lanzó hace dos meses para enfrentar a Mauricio Macri en la política de la ciudad.
En rigor, Santa María no figura como titular de la licencia en el Decreto 1779, que adjudicó esa frecuencia, sino que está a nombre de una sociedad formada por el presidente de la Fundación Octubre -del gremio-, Santiago Roberto; el ex vocero de Antonio Cafiero, Renato Miari y otros tres socios.
Consultado sobre el tema, Santa María atinó a responder: "Ustedes ponen que soy el dueño, pero yo solo colaboro". Sin embargo, también salió como vocero en varias entrevistas diciendo que él asumía la gestación de la radio por la que tanto puja. Algo similar ocurre en el Partido Justicialista de la ciudad, donde el titular es Juan Manuel Olmos, pero quien lo maneja, según las fuentes, es el mismo Santa María, sin que figure su nombre entre las autoridades del PJ Capital.
La cuestión con el líder de los porteros es que no trabajó en la campaña para diputado de Carlos Heller como quería el kirchnerismo. Santa María maneja un sector del fragmentado el peronismo porteño y tenía -y tiene- ambiciones políticas propias. Néstor Kirchner dejó de apoyarlo en la gestión de la radio, y se distanció abiertamente, cuando Santa María invitó al cumpleaños de su gremio a Francisco de Narváez. Fue un gesto político demasiado fuerte y Kirchner ya no lo quiere en el dial.
La AM 750 se adjudicó a través de un concurso público, que empezó en mayo de 2007 y culminó en noviembre del año siguiente. Pero todos los que participaron lo recuerdan como el concurso más conflictivo de los últimos años, con impugnaciones que todavía no fueron respondidas por el COMFER, ni por su continuador, que es la Autoridad Federal de medios audiovisuales.
Una apoderada que participó del concurso recuerda el escándalo que terminó a los gritos cuando ella acusó a Susana Pachecoy -pareja del número dos del COMFER- de copiarle varios escritos en ese concurso. "Pachecoy se llevaba el expediente y después se presentaba en representación de otro oferente, copiando lo mismo que yo había puesto", se quejaba ayer esa abogada, que prefirió no dar su nombre para evitar problemas con una de las personas que más poder tiene dentro del organismo que aplica la ley de medios.
Otro de los participantes en el concurso de la AM 750 recordó que originalmente Néstor Kirchner quería dársela a Santa María para que le administre la radio en la ciudad, cuando ambos eran socios políticos. Por eso, habrían sido descalificados los otros cuatro oferentes "por cuestiones de forma", dijo la fuente; y, entonces, la única que pudo ser evaluada en función de su propuesta cultural fue la sociedad Buenos Contenidos, apadrinada por Santa María
Además del problema político, la asignación de una frecuencia que no estaba operativa en la ciudad de Buenos Aires presenta conflictos con Radio Cooperativa, con una radio que emite en Uruguay en la frecuencia de 740 Megahertz y con los otros cuatro oferentes que quedaron afuera del concurso.
Via Yimber Gaviria, Colombia
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